Cuando era un niño mi padre me construyó una cometa con una tela roja, unas varillas de caña y una larga cola con lazos atados. Para volarla la sujetaba con una cuerda de bramante que enrollaba en un palo de madera. Así nació en mí la afición por las cometas, que ahora de mayor comparto con Ana, Carlos, Sergio, Enzo y Saúl.
Espero que algunas cosas que veáis en este blog os animen a practicar y compartir esta afición tan agradable y entretenida. Las cometas no son simples juguetes, sino que representan un medio a través del cual se expresa la cultura y el arte de numerosos pueblos del mundo.
En la columna principal del blog podrás leer artículos de divulgación relacionados con las cometas. En la barra lateral derecha puedes acceder a páginas más personales clasificadas por temas y también a diferentes tipos de recursos.
He diseñado y construido esta cometa con forma de decágono
irregular utilizando papel japonés Washi Mingeishi para la cubierta y varillas
de bambú con un cordel de algodón para el armazón. El dibujo de la cubierta es
una versión modificada de la xilografía sobre papel titulada “The Cat” (1968)
del artista Jacques Hnizdovsky, expuesta en el Museo Smithsonian de Arte Americano. El nombre “Neko” de la cometa significa gato en japonés (猫).
La cometa mide aproximadamente 62,5 cm de alto y 64,5 cm de
ancho. Esta es mi cometa:
Cometa Neko (vista anterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Cometa Neko (vista posterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
El armazón está construido con varillas de bambú que previamente había dividido y preparado a partir de una caña de este material. Las varillas de bambú están unidas con hilo torzal de poliéster muy resistente. Las uniones están reforzadas con cola blanca y están pintadas de marrón por la parte posterior para encubrirlas. El perímetro de la cometa está formado por un cordón de algodón trenzado (perlé) atado a las varillas de bambú y pegado con cianocrilato para reforzar las uniones. La estructura de este armazón se muestra en la siguiente foto:
Estructura del armazón de la cometa Neko
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Las dimensiones de los diferentes elementos se indican en el siguiente plano en centímetros, mostrando en color morado las varillas de bambú, en negro el cordón textil del perímetro y con círculos rojos los puntos donde van atados los cabos o frenillos de la brida:
Plano de la cometa Neko
(Dibujo: Juan Antonio Muñoz)
Dimensiones en centímetros:
AB
CD
AK
KL
LM
MB
AN
ES, FT
EF
62,5
64,5
18,5
13
24
7
74
62,5
16
GH
IJ
ST
BN
GI, HJ
OK, PK
QM, RM
AU, VB
60
41
20,5
11,5
38
20
10
2
Para sujetar firmemente los dos cabos superiores de la brida, pegué con cola blanca unas fijaciones acanaladas de madera en los puntos del travesaño indicados en el plano (O, P):
Detalle de una fijación acanalada para los cabos superiores de la brida
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
La cubierta de la cometa es de papel japonés “Washi
Mingeishi” de color natural, con un gramaje de 53 g/m2. En el papel dibujé
el boceto del gato y lo pinté con acrílico negro:
Pintando la cometa Neko
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Las patas del gato las había dibujado y recortado aparte:
Patas del gato recortadas
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
La cubierta decorada con las patas superpuestas quedaba inicialmente así:
Cubierta decorada con las patas superpuestas
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Recorté el papel al tamaño apropiado para ajustarlo al armazón de la cometa:
Cubierta decorada y ajustada al armazón
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Posteriormente pegué el papel al perímetro del armazón con cola blanca y después encolé también las patas en la parte inferior de la cubierta, sobre el larguero principal:
Cubierta decorada con pintura acrílica y pegada al armazón (Foto: Juan Antonio Muñoz)
Sujeté los cabos de la brida en los puntos indicados en el plano y até un lazo con un nudo Prusik para que el punto de amarre de la brida fuese ajustable, con el fin de permitir modificar el ángulo de ataque de la cometa según el viento existente. La estructura de la brida se muestra en el siguiente dibujo:
Brida de la cometa Neko
(Dibujo: Juan Antonio Muñoz)
Por último, en el extremo inferior del larguero central até un cordel negro para formar el nudo de amarre donde sujetar la cola de la cometa:
Antes de volar cualquier cometa es importante saber cómo hacerlo de forma correcta, en un lugar seguro y cerciorarse de que no se va a molestar a nadie. A continuación, explico algunas normas de vuelo y seguridad a tener en cuenta para prevenir problemas y accidentes cuando se vuelan cometas:
Informarse sobre la normativa local sobre el vuelo de cometas: en algunas playas y parques urbanos o regionales, las ordenanzas no permiten el vuelo de cometas.
Parque urbano donde está permitido volar cometas
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Comprobar la cometa antes de cada vuelo: fijarse si hay daños en la estructura o enredos en la brida. Comprobar que la línea del carrete tampoco presenta enredos. Hay que tener especial cuidado con las cometas nuevas o que no han sido probadas.
Comprobando la cometa antes del vuelo
(Foto Ana Romero)
Sobre el viento: volar la cometa únicamente en el
rango de velocidad del viento recomendado por el fabricante para poder
controlar la cometa adecuadamente. El piloto debe estar siempre de espaldas al
viento.
Respeto a los demás: no se debe hacer uso de la
cometa si con ello podemos causar algún tipo de daño o molestia a personas o
enseres, bien en la realización del vuelo o mediante el lanzamiento de objetos
con mensajeros.
Vigilar de cerca a los niños cuando se vuela una cometa:
los niños no deben volar cometas sin la supervisión de un adulto, ni estar
dentro de la ventana de viento de una cometa en vuelo. Incluso un piloto
experto puede perder el control de su cometa con el riesgo de que las líneas o
la cometa puedan impactar en algún pequeño.
Altitud de vuelo: en la mayoría de los países hay pocas
regulaciones o ninguna para volar cometas, pero en unos pocos las cometas deben
volarse de acuerdo con las regulaciones de la Administración de Aviación
correspondiente. Por ejemplo, en el Reino Unido se requiere un permiso de la
CAA (Civil Aviation Authority) para
volar una cometa a una altura superior a 60 metros (197 pies). En los EE. UU.,
la Administración Federal de Aviación ha establecido que las cometas no pueden superar los 46
metros (150 pies) de altura con algunas condiciones sobre los pesos. En Australia
se pueden alcanzar los 122 metros (400 pies).
Vías de transporte: evitar los vuelos en zonas
cercanas a los aeropuertos, vías de tren, autopistas y carreteras. Volar cerca de
carreteras puede distraer la atención de algún conductor y causar una colisión.
Si se vuelan cerca de un aeropuerto o una base aérea, las cometas pueden
distraer a los pilotos durante el despegue o el aterrizaje y/o ser absorbidas
por los motores de los aviones.
Líneas de cables: evitar las cercanías de líneas de
tendido eléctrico o telefónico.
No se debe volar cometas cerca de un tendido eléctrico
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Si la cometa queda atrapada en una línea eléctrica, no se debe tocar la línea ni la cometa, pues la electricidad puede viajar fácilmente por la línea de la cometa hasta el piloto, independientemente del tipo de línea que esté utilizando, y sufrir un grave accidente. Soltar inmediatamente la línea, abandonar la cometa y alejarse.
Cometa enganchada en un cable eléctrico
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Tormentas: evitar el vuelo si hay riesgo de tormenta, pues los hilos húmedos de la cometa pueden hacer de conductores y provocar un accidente al piloto.
Animales: prestar atención a los animales. Los caballos, perros, etc. pueden asustarse y causar un accidente. Asegurarse siempre de que no haya perros alrededor cuando se aterriza una cometa. En algunos casos, se sabe que muerden la cometa y se escapan con ella. Los pastos donde hay vacas y caballos pueden ser peligrosos para el piloto y su cometa. Puede que se asusten o que no les guste que invadan su espacio. Solicitar también permiso al dueño para estar allí.
Usar guantes: el uso de guantes de piel o similar previene cortes producidos por hilos abrasivos como Dyneema o poliéster, sobre todo con cometas estáticas.
Es aconsejable usar guantes para manipular la línea de la cometa
(Foto: Ana Romero)
Recoger el hilo de la cometa en vuelo: cuando hay que tirar del hilo de una cometa grande y con fuerte viento para hacerla descender, no se debe enrollar el hilo alrededor de la mano, ni siquiera con guantes, pues la tensión de la cometa puede ser muy grande y producir alguna lesión grave en la mano.
No se debe enrollar la línea de la cometa alrededor de la mano
(Dibujo: Juan Antonio Muñoz)
En estas ocasiones se puede utilizar un buen carrete, una
polea para descender la cometa o una empuñadura de agarre de mano (véase “Accesorios” en
este mismo blog):
Bajando la cometa con una polea
(Foto: Ana Romero)
Líneas de vuelo: no usar nunca una línea de vuelo
metálica o hilo de nailon de pescar. El hilo metálico es muy buen conductor de la
electricidad y podrían causar descargas eléctricas cuando tocan o se acercan a
líneas eléctricas. El hilo de pescar es muy elástico y puede estirarse mucho
antes de romperse. Si esto sucede retrocede con fuerza, pudiendo provocar lesiones
al piloto y a los que le rodean. Además, ambos tipos de hilo son difíciles de
ver a cierta distancia y son muy cortantes.
Cuidado con el terreno: volar una cometa obliga al
piloto a concentrar su atención en la misma, olvidando a veces de observar las irregularidades
del terreno. Antes de iniciar el vuelo, inspeccionar el terreno, evitando zonas
con riesgos, como rocas y hoyos donde el piloto puede tropezar y caer.
Buscar lugares despejados: evitar volar en las
cercanías de aparcamientos, zonas de paseo, etc. Buscar siempre zonas abiertas,
sin arbolado ni edificios, para poder obtener el máximo rendimiento de los
vientos que soplen en ese momento.
Volando una cometa tetraédrica en una zona abierta
(Foto: Ana Romero)
Cometas enganchadas: no intentar rescatar una cometa enganchada en árboles o postes por el riesgo de sufrir un accidente. Yo mismo he presenciado cómo una persona cayó desde una rama de un árbol que se rompió al intentar recuperar una cometa enganchada en ella.
Persona rescatando una cometa en un poste de luz a varios metros de altura
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Respetar la naturaleza: recoger los desperdicios
que se hayan generado. Evitar volar en zonas donde la visión de una cometa
volando, o su ruido, puedan molestar a animales anidando, rebaños, reses, etc.
Avisar a personas despistadas: algunas personas,
de forma involuntaria, pueden penetrar en la zona de vuelo con el consiguiente
riesgo de lesión. Avisar de forma clara a estas personas o colocar alguna
señalización que avise de la existencia de cometas en vuelo. Recordar que los
hilos son elementos cortantes y los armazones auténticos cuchillos. Volar con
precaución si hay espectadores cerca de nosotros, es posible que desconozcan
que las cometas pueden ser peligrosas.
Anclaje de la cometa: asegurarse de que los anclajes
de la cometa sean lo suficientemente fuertes y seguros para sostenerla:
Anclaje de una cometa mediante un ancla helicoidal para fijación en tierra
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Utilizar equipo de protección: usar gafas de sol, sombrero y crema solar protectora. Al volar cometas siempre se mira al cielo y en muchas ocasiones con el sol de frente. Llevar alguna botella de agua, pues el viento y el ejercicio que se realiza al volar una cometa, especialmente si es una cometa acrobática o de tracción, pueden provocar una intensa sed.
Es importante protegerse del sol al volar cometas
(Foto: Ana Romero)
Limitaciones personales: hay que ser consciente de las limitaciones de la fuerza y habilidades personales. No se debe volar una cometa demasiado grande con vientos fuertes, ni intentar vuelos demasiado complicados cerca de otras personas.
La cometa Hina que he construido es originaria de la ciudad Kitakyushu en Japón. Representa una muñeca Hina vestida con un kimono tradicional y está hecha especialmente para volar en el día de las niñas (Hinamatsuri). El término “hina” es la abreviatura de la palabra hi’ina que significa “pequeño y bello”. Las muñecas Hina representan el deseo de los padres para que su hija crezca y se convierta en una mujer hermosa, sana y amable, bendecida con un buen matrimonio y una vida feliz.
Esta es mi versión de dicha cometa:
Cometa Hina (vista anterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Cometa Hina (vista posterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
He utilizado para su construcción papel japonés Tosa-washi blanco para la cubierta y varillas de bambú para el armazón. La cometa mide aproximadamente 82 cm de largo y 57 cm de ancho.
Las dimensiones de los diferentes elementos de la cometa se indican en el siguiente plano en centímetros, mostrando en color negro las varillas de bambú y con círculos rojos los puntos de sujeción de los cabos de la brida:
Plano de la cometa Hina
(Dibujo: Juan Antonio Muñoz)
Dimensiones en centímetros:
AB
DE
AC
AF
AG
AH
AI
82,5
57,5
90
10,5
17
31
46
AJ
KL
MN
OP
ST
QR
AU
59,5
18
29,5
36
47
50,5
1
El armazón del cuerpo de la cometa está construido con varillas de bambú que previamente había dividido y preparado a partir de una caña de este material. Para dar la forma curvada a las varillas de bambú utilicé el calor de una pistola de aire caliente:
Curvando una varilla de bambú
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Las varillas de bambú están atadas con hilo torzal de poliéster blanco muy resistente. Todas las uniones las reforcé con cola blanca:
Armazón de la cometa Hina (vista anterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
En el papel washi de la cubierta dibujé los trazos principales del dibujo. Recorté el papel al tamaño apropiado y lo fijé al marco de la cometa con cola blanca:
Cubierta con el boceto pegada al armazón
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Decoré la cometa con pinturas acrílicas utilizando los colores tradicionales de esta cometa:
Cometa Hina decorada con pinturas acrílicas
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Até los cabos de la brida en los puntos del armazón indicados en el plano anterior y un nudo de amarre para sujetar la cola de la cometa en el extremo inferior del larguero central: