Cuando era un niño mi padre me construyó una cometa con una tela roja, unas varillas de caña y una larga cola con lazos atados. Para volarla la sujetaba con una cuerda de bramante que enrollaba en un palo de madera. Así nació en mí la afición por las cometas, que ahora de mayor comparto con Ana, Carlos, Sergio, Enzo y Saúl.
Espero que algunas cosas que veáis en este blog os animen a practicar y compartir esta afición tan agradable y entretenida. Las cometas no son simples juguetes, sino que representan un medio a través del cual se expresa la cultura y el arte de numerosos pueblos del mundo.
En la columna principal del blog podrás leer artículos de divulgación relacionados con las cometas. En la barra lateral derecha puedes acceder a páginas más personales clasificadas por temas y también a diferentes tipos de recursos.
La cometa con forma de pájaro con patas que he construido es
una recreación personalizada de una cometa de la colección de objetos
perteneciente a los diseñadores Charles y Ray Eames,
conservada en el Instituto Eames
de California. La cometa original fue construida en Tailandia durante la
segunda mitad del siglo XX, según indica un sello en el reverso de la cometa, y
representa un pájaro con las alas y patas extendidas. Una de sus
características más destacadas es que posee una quilla semielíptica que sirve
para darle estabilidad y para fijar el punto de anclaje de la línea de vuelo.
He reconstruido esta cometa con el mismo tamaño que la
original y utilizando materiales similares: papel, bambú, cuerda y pinturas
acrílicas en lugar de tinta. Esta es mi versión de la cometa pájaro con patas que
mide aproximadamente 63,5 x 76 cm:
Cometa pájaro con patas (vista anterior) (Foto: Juan Antonio Muñoz)
Cometa pájaro con patas con la quilla separada (vista anterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Cometa pájaro con patas (vista posterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Las medidas de las distintas secciones del cuerpo de la cometa que he construido se indican en centímetros en el siguiente plano a escala. Las varillas de bambú están resaltadas en morado y el punto de anclaje de la línea está marcado con un círculo rojo en la quilla:
Plano a escala del cuerpo de la cometa pájaro con patas
AB: 48 cm; CD: 63,5 cm; E: quilla
(Dibujo: Juan Antonio Muñoz)
La cubierta de esta cometa es de papel nepalí lokta
hecho a mano de color natural y con un gramaje de 51 g/m2. Recorté
el papel con la forma de la cometa según el plano y dibujé en él los trazos
principales del dibujo original:
Boceto del cuerpo de la cometa
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
El papel lokta, al ser artesanal, presenta algunas pequeñas manchas o variaciones de color debido a la corteza de la planta de lokta utilizada en su fabricación.
A continuación, pinté el papel reproduciendo el diseño original de esta cometa y tratando de reproducir el estilo de la pintura original, con pinceladas rápidas y firmes aplicadas con pinturas acrílicas:
Papel lokta pintado con el diseño original
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Para el armazón de esta cometa utilicé varillas de bambú y una varilla de madera de haya para las alas. Pegué todas estas varillas en la parte posterior de la cubierta según el plano:
Varillas del armazón pegadas a la cubierta
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Al igual que en la cometa original, pegué varios refuerzos de papel sobre las varillas:
Refuerzos de papel pegados sobre las varillas del armazón
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Papel del cuerpo decorado y pegado al armazón (vista anterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Para construir la quilla utilicé dos varillas de bambú, una recta y otra curvada, que uní por los extremos con hilo y pegamento. Recubrí el armazón de la quilla con papel lokta y lo pinté. Me tomé la libertad de reinterpretar el diseño original de la quilla, introduciendo algunas variaciones en el dibujo para que encajara con la parte de la cubierta donde se colocaría la quilla, algo que no ocurre en la cometa original:
Vista anterior (izquierda) y posterior (derecha) de la quilla
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Cuerpo de la cometa con la quilla superpuesta
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Fijé la quilla a la varilla central del armazón de la cometa con hilo de lino, atándola en tres puntos: los dos extremos y el centro.
Quilla sujeta al armazón en tres puntos
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Para elaborar las patas utilicé papel crepé naranja de unos 3,5 cm de ancho y unos 31 cm de largo. Pinté las patas con franjas negras conforme a las originales. Las borlas de flecos que rematan las patas las hice con papel de seda también naranja:
Patas con borlas de la cometa
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Pegué las patas en la parte posterior del cuerpo de la cometa, tal como se ve en la imagen:
Patas pegadas al armazón (vista posterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Las patas extendidas de esta cometa hacen de cola y sirven para facilitar el vuelo. Este tipo de colas, y las borlas que llevan unidas, añaden peso a su extremo inferior y aumentan la resistencia al avance. Esta resistencia o fuerza de arrastre estabiliza la cometa al evitar que gire con el viento.
Por último, até un lazo con cuerda de lino en la quilla de la cometa para sujetar la línea de vuelo y proporcionar a la cometa un cierto ángulo de ataque. En la parte posterior había dejado un lazo con la cuerda de lino para poder sujetar la cometa:
Mostrando la cometa pájaro con patas
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
A partir de la relación entre la superficie y el peso de
esta cometa, pude calcular con mi hoja de cálculo la carga de vela o densidad,
lo que me permitió determinar que esta cometa necesitaría un viento medio de
unos 9 km/h para volarla. Solo me quedaba esperar el momento y lugar adecuados.
En este artículo explicaré cómo construí un sistema de suspensión Picavet para todos aquellos aficionados que estén interesados en practicar la fotografía aérea desde una cometa (Kite Aerial Photography, KAP).
Mi Picavet transportando una cámara GoPro
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
El Picavet es un sistema de suspensión que permite mantener en posición horizontal una cámara fotográfica o de vídeo suspendida de una cometa, independientemente del ángulo que forme la línea de vuelo con el plano horizontal. En esta secuencia fotográfica se muestra el principio de la nivelación del Picavet:
Funcionamiento de la suspensión Picavet
La cámara se mantiene horizontal (línea amarilla) aunque la línea de vuelo (línea roja) cambie su inclinación.
(Vídeo: Juan Antonio Muñoz)
El Picavet que construí tiene una estructura estándar en forma de cruz (+), donde un brazo del soporte se orienta paralelo a la línea de sujeción de la cometa y el otro en ángulo recto. Esta variación es la más conocida y utilizada:
Mi Picavet con una cámara GoPro
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Los materiales que utilicé fueron los siguientes:
Materiales para la construcción del Picavet (No a escala)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
1. Abrazadera de PVC para canalón (2x).
2. Escuadras metálicas galvanizadas y ajustables de 7,5 x 5 cm.
3. Tornillos de rosca y tuercas.
4. Tornillo de rosca con mariposa y arandela.
5. Tornillo para sujeción de cámaras fotográficas.
6. Anilla metálica de 2 cm de diámetro.
7. Poleas de acero cincado, diámetro 12 mm, ranura 4 mm (4x).
8. Polea doble de pitón, diámetro de 20 mm con un canal redondo de 4 mm de ancho (2x).
9. Hembrillas cerrada con tuerca rosca (de 4 a 6) (opcionales en lugar de las poleas).
10. Mosquetones (2x).
11. Emerillones giratorios de pesca (2x).
12. Anilla de llavero (2x).
13. Prisioneros o cierres para cordón (2x).
14. Cuerda trenzada de 2 mm, color azul.
Construcción de la cruz: Para formar la cruz utilicé dos piezas rectangulares de PVC, de 14 cm de largo por 1,5 cm de ancho, procedentes de unas abrazaderas para canalones. Estas piezas ya contaban con los orificios necesarios para fijar las poleas. Las uní en forma de cruz usando pegamento para PVC y reforcé la unión atornillando, por ambos lados, dos fragmentos en ángulo que recorté de la propia abrazadera. Finalmente, en los extremos de la cruz atornillé las cuatro poleas de 12 mm:
Cruz del Picavet con las poleas en sus extremos
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Los materiales para la cruz pueden ser muy variados, lo importante es que sean ligeros y resistentes (aluminio, madera contrachapada, etc). En general, las dimensiones de las piezas del Picavet pueden variar entre 8 a 30 cm.
Los puntos de suspensión para la línea del Picavet pueden ser hembrillas atornilladas, pero el uso de poleas reduce considerablemente la fricción de la línea.
Soporte para la cámara: El soporte está formado por dos escuadras metálicas ajustables unidas entre sí, dejando entre ambas un espacio de aproximadamente 10 cm, que se puede ajustar en altura y profundidad, para alojar la cámara. Se fija a la cruz del Picavet mediante un tornillo con mariposa, lo que facilita el montaje y desmontaje. Para apretar el tornillo con mayor comodidad, pegué una llave de ajuste en la cabeza del mismo:
Soporte para la cámara unido a la cruz del Picavet
En la parte inferior, un tornillo sirve para sujetar la cámara al soporte.
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Enhebrado del Picavet: la cuerda del Picavet forma un bucle continuo (cuerda sin fin) que se enhebra a través de las poleas de la cruz siguiendo un orden determinado. La cuerda se conecta a la línea de la cometa en dos puntos de fijación, que en este caso son dos poleas dobles.
La secuencia de enhebrado es la siguiente: A→1→R→B→2→R→A→3→B→4→A
Esquema del enhebrado del Picavet
A y B representan los puntos de fijación a la línea de la cometa, R es el anillo central y los números representan poleas o hembrillas.
Orden de enhebrado: A→1→R→B→2→R→A→3→B→4→A
(Dibujo: Juan Antonio Muñoz)
El anillo central sirve para impedir que la cruz gire sobre su propio eje.
La cuerda termina en la misma polea de la que partió. Uní ambos extremos de la cuerda con un nudo.
La cuerda de mi Picavet mide 9,20 m, aproximadamente. Cada lado mide 4,60 m. Cuando la distancia entre los puntos de retención es de 1,25 m, la altura del Picavet hasta la línea de vuelo es de 1 m, aproximadamente:
Vista completa de mi Picavet
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Utilicé poleas dobles en los puntos de fijación (A y B en el plano), aunque en realidad no son necesarias y pueden sustituirse por simples anillas. Esto se debe a que la cuerda del sistema Picavet no se desplaza por estas poleas cuando varía el ángulo de la cometa y el soporte se nivela. De hecho, es recomendable que la cuerda permanezca fija en los puntos de fijación una vez que el Picavet ha alcanzado su nivelación inicial, como mostraré más adelante.
No obstante, opté por las poleas dobles por dos motivos: facilitan el montaje del sistema y, al conectar el Picavet a la línea de la cometa, puede ser necesario nivelar manualmente la cruz. Este es el único momento en el que la cuerda se puede deslizar a través de las poleas de los puntos de fijación.
Fijación del Picavet a la línea de la cometa: El saliente de cada polea doble está unido a un conjunto de anilla, emerillón giratorio y mosquetón, tal como se aprecia en esta foto:
Detalle de la fijación del Picavet a la línea de vuelo de la cometa
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Para facilitar la sujeción del mosquetón a la línea de vuelo, eliminé el cierre o gatillo del mismo, quedando el mosquetón abierto. La línea de vuelo se sujeta sobre el cuerpo del mosquetón mediante una o dos vueltas:
Detalle de los puntos de fijación del Picavet a la línea de vuelo de la cometa
(Fotos: Juan Antonio Muñoz)
Una vez que el Picavet ha quedado nivelado en la línea de la cometa al colocarlo para el vuelo, se puede bloquear la cuerda en las poleas dobles utilizando prisioneros o cierres para cordón, con el fin de evitar que las cuerdas del Picavet se desplacen durante el vuelo por las poleas dobles:
Bloqueo de las cuerdas del Picavet en las poleas dobles mediante un prisionero
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
El sistema de Picavet suspendido de mi cometa se puede ver en estas fotos:
Mi cometa Delta Conyne con el Picavet colgando de la línea
(Foto: Ana Romero)
Mi cometa Delta Conyne con el Picavet en un Festival de cometas
(Foto: Ana Romero)
Con este Picavet he utilizado diferentes cámaras GoPro, obteniendo como resultado imágenes como estas:
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Creo que la fotografía aérea con cometas (KAP) sigue siendo relevante y atractiva pese a la aparición de los drones. Para mí supone un reto técnico y creativo que requiere conocer bien el viento, saber cómo aprovecharlo o resistirse a él, manejar con precisión la línea de vuelo y llevar la cometa con la cámara hasta el punto más apropiado para fotografiar las imágenes deseadas. A diferencia de los drones, las cometas vuelan bien con viento fuerte, permitiendo operar donde estos no pueden y alcanzar alturas mucho mayores soltando más hilo. Además, el sistema KAP suele ser mucho más barato. Otro punto a favor es que en zonas donde los drones están restringidos o prohibidos, suele ser más fácil volar una cometa sin trámites legales. Por estas razones, la KAP sigue siendo hoy una alternativa atractiva y didáctica para principiantes en fotografía aérea.
Estos son algunos consejos básicos para quienes desean iniciarse en la práctica del vuelo de cometas:
1. Materiales de construcción: si haces tu propia cometa, procura que sea ligera. Para cometas pequeñas os aconsejo papel, puede ser cualquiera, cuanto más liviano y resistente mejor. Una bolsa de plástico es una buena opción para las cometas hechas a mano, pero no es una solución ecológica. Para cometas más grandes puedes utilizar una tela ligera, nailon o ripstop, aunque en este caso tendrás que coser. El armazón de la cometa debe ser el adecuado para el tipo de cometa, tanto en peso como en resistencia. Así, para cometas de papel pequeñas, prueba con varillas de bambú, plástico o madera. Para cometas de tela o nailon más grandes, utiliza varillas de fibra de vidrio o fibra de carbono.
Joven construyendo una cometa
(Imagen: Juan Antonio Muñoz con IA)
2. Cometas compradas: si compras una cometa, no hace falta que sea cara. Normalmente las cometas baratas hechas con materiales ligeros de nailon con estructura de fibra de vidrio o plástico suelen volar bastante bien. Si no tienes claro con qué tipo de cometa quieres iniciarte, prueba con una cometa delta. Siempre vuelan bien. Es fácil caer en la tentación de comenzar con cometas exóticas, muy grandes o complejas que a menudo son muy caras y requieren mayor experiencia para mantenerlas en el aire.
Volando una cometa delta
(Foto: Ana Romero)
3. Línea y carrete: elige la cuerda adecuada para tu cometa, tanto en peso como en resistencia. Una línea trenzada de algodón, nailon o dacrón sintético funcionan bastante bien. No utilices nunca hilos de pesca. Es necesario un carrete, bobina o devanadera para enrollar la línea y facilitar su salida y recogida. Los carretes tipo aro o yoyo son muy aconsejables. Procura protegerte las manos con guantes.
Utilizando guantes y carrete de aro para volar una cometa
(Foto: Ana Romero)
4. Conoce el viento: debes saber hacia dónde sopla el viento. Siempre tienes que colocarte de espaldas al viento para que la cometa se eleve. Para conocer la dirección del viento, tira unas hierbas al aire, utiliza una cinta ligera que ondee al viento, observa las hojas de los árboles o la hierba que se balancea, mire las banderas, pancartas u otras cometas cercanas. Si puedes, consulta los pronósticos del tiempo, también te ayudarán.
Cinta indicadora de la dirección del viento
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
5. Cómo lanzar la cometa: no hay que correr para volar una cometa, sólo los niños lo hacen, basta con soltar la cometa contra el viento. Normalmente las personas que corren con una cometa para volarla, suelen desconocer la dirección del viento. Además, pueden tropezarse o chocar con un obstáculo u otra persona. También es probable que la cometa se caiga cuando deje de correr a menos que se eleve lo suficiente como para encontrar un viento más fuerte.
¿Cómo hay que lanzar la cometa? Depende de la fuerza del viento.
Cuando el viento es flojo, os recomiendo soltar bastantes metros de línea (alrededor de 25 metros o más) y que otra persona sostenga la cometa en el otro extremo frente al viento. En el momento adecuado indica a tu ayudante que suelte la cometa para que se levante naturalmente de sus manos, sin lanzarla contra el viento:
Lanzando una cometa con ayuda de otra persona
(Imagen: Juan Antonio Muñoz con IA)
Con viento moderado o fuerte, basta simplemente con levantar la cometa para que quede de frente y atrape toda la fuerza del viento. Suelta la cometa y libera línea hasta que la cometa alcance una altitud estable. Normalmente el viento es más fuerte a partir de los 4 a 6 metros sobre el suelo.
Soltando una cometa Switch con viento moderado
(Foto: Ana Romero)
6. Control de la línea: hay que controlar la tensión de la línea en todo momento. A medida que la cometa se eleva, libera línea para ganar altura y recoge línea si ésta se afloja. Para ganar altitud hay que soltar y tirar de la línea alternativamente, soltando cada vez más línea de la que se tira:
Volando una cometa india de combate
(Vídeo: Juan Antonio Muñoz)
7. Anclaje de la línea: clava alguna estaca en el suelo donde puedes atar la línea si necesitas descansar, así la cometa seguirá en el aire:
Estaca para sujetar o anclar la línea de la cometa al suelo
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
8. Mantenimiento: si vas a volar cometas de forma continuada es recomendable tener preparado un equipo de reparación para la cometa, con cinta adhesiva, tijeras, varillas extra, cuerda extra, colas extra y parches de papel o de nailon.
Diferentes tipos de colas extras
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
9. Seguridad: no te arriesgues. Nunca vueles una cometa en tiempo de tormenta o cerca de líneas eléctricas, coches y árboles. Mantén una distancia segura de los demás y protégete de las quemaduras solares con un sombrero, gafas de sol y protector solar.
Protecciones al volar cometas con sombrero, gafas de sol y guantes
(Foto: Ana Romero)
10. Lo más importante: ten en cuenta que puede haber algo de frustración al principio. Volar cometas requiere ensayo y error, con continuos ajustes según cambie el viento. Ten paciencia si no lo logras a la primera. Lo esencial es no rendirse y pasarlo bien.
La cometa “Oni de Iki” o “cometa demoniaca de Iki” es una
cometa tradicional japonesa originaria de la isla Iki en la Prefectura de Nagasaki. Su diseño representa una leyenda que narra la lucha entre un
demonio (Oni) y un héroe legendario del folclore japonés. Más adelante
contaré con mayor detalle esta leyenda.
La cometa Oni de Iki que he construido mide 85 cm de largo y
58 cm en su parte más ancha. Está confeccionada con varillas de bambú y papel
japonés Tosa-shi. Decoré la cometa a mano con pinturas acrílicas personalizando
uno de los dibujos clásicos de este tipo de cometas:
Cometa Oni de Iki (vista anterior) (Foto: Juan Antonio Muñoz)
Cometa Oni de Iki (vista posterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
El diseño de esta cometa tradicional de la isla de Iki
representa el momento en que Yuriwaka Daijin, un héroe con rasgos de samurái,
decapita al Rey de los demonios que habitaban la isla de Iki. Según la
tradición, tras ser vencido, la cabeza del demonio voló por el cielo y, en un
último intento por atacar, mordió con furia el casco de Yuriwaka antes de caer
sin vida. La imagen de la cabeza del demonio (oni) incrustada en el
yelmo del guerrero simboliza la victoria del bien sobre el mal. Los flecos rojos
y blancos simbolizan lágrimas.
Las medidas de las distintas secciones de la cometa que he
construido se indican en centímetros en el siguiente plano a escala. Los
puntos de anclaje de los cabos de la brida están marcados con círculos rojos:
Plano a escala de la cometa Oni de Iki
AB: 85,5 cm; CD: 58 cm; BE: 10 cm
(Dibujo: Juan Antonio Muñoz)
El armazón está formado por diferentes tipos de varillas de bambú, cuyas secciones oscilan entre 2 y 6 mm de ancho. Para curvar algunas de las varillas de esta cometa y darles su forma característica, utilicé una pistola de aire caliente. Até todas las varillas de bambú con hilo torzal de poliéster y reforcé todas las uniones con cola blanca:
Armazón de la cometa Oni de Iki (vista posterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
En la parte inferior de los círculos de bambú más pequeños sujeté unos pequeños ojales metálicos donde posteriormente ataría los flecos de la cometa:
Ojal metálico para sujetar los flecos
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
La cubierta de esta cometa es de papel japonés Tosa-shi con un gramaje de unos 52 g/m2.
Dibujé en este papel los trazos principales del dibujo y lo coloreé con
pinturas acrílicas, reproduciendo el diseño original de esta cometa:
Decoración de la cubierta de la cometa Oni de Iki
(Fotos: Juan Antonio Muñoz)
A continuación, recorté el papel Tosa-shi al tamaño apropiado y lo pegué al marco de bambú con cola blanca:
Papel de la cometa Oni de Iki pegado al armazón (vista posterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Después de dar los últimos retoques a la pintura de la cubierta, la cometa quedó así:
Papel de la cometa Oni de Iki pegado al armazón (vista anterior)
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Para finalizar, sujeté en los ojales de los círculos de bambú unos flecos blancos y rojos, que son característicos en esta cometa. En el extremo inferior del larguero central até un cordel para formar el nudo de amarre donde sujetar una cola. Até los cinco cabos de la brida en los puntos indicados en el plano, comprobando que la cometa quedase bien equilibrada y con un cierto ángulo de ataque.
Mostrando la cometa Oni de Iki
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
A partir de la relación entre la superficie y el peso de esta cometa, pude calcular con mi hoja de cálculo la carga de vela o densidad, lo que me permitió determinar que esta cometa necesitaría un viento de unos 15 km/h para volarla. Solo me quedaba esperar el momento y lugar adecuados.
Actualmente, las cometas Oni se exhiben en los hogares de la isla Iki como amuletos para garantizar la seguridad familiar y la salud. En 1993 fue designada como artesanía tradicional por el gobernador de la prefectura. En el pasado, había varios artesanos de cometas Oni en la isla de Iki, pero ahora solo quedan una joven artesana y su abuela.