Cuando era un niño mi padre me construyó una cometa con una tela roja, unas varillas de caña y una larga cola con lazos atados. Para volarla la sujetaba con una cuerda de bramante que enrollaba en un palo de madera. Así nació en mí la afición por las cometas, que ahora de mayor comparto con Ana, Carlos, Sergio, Enzo y Saúl.
Espero que algunas cosas que veáis en este blog os animen a practicar y compartir esta afición tan agradable y entretenida. Las cometas no son simples juguetes, sino que representan un medio a través del cual se expresa la cultura y el arte de numerosos pueblos del mundo.
En la columna principal del blog podrás leer artículos de divulgación relacionados con las cometas. En la barra lateral derecha puedes acceder a páginas más personales clasificadas por temas y también a diferentes tipos de recursos.
El viento es el motor de las cometas por lo que es fundamental entenderlo para volar una cometa con éxito. El mejor lugar para volar cometas es la playa, porque el viento sopla en línea recta. En zonas interiores el viento viene de diferentes direcciones y a rachas, no como el flujo continuo y laminar que hay en las playas.
Volando cometas en la playa
(Foto: Ana Romero)
La dirección de donde procede el viento se expresa en grados. Se cuentan en el sentido de las agujas del reloj a partir del norte geográfico; a ese punto se le asigna el valor de 0⁰ o 360⁰, al Este 90⁰, al Sur 180⁰ y al Oeste 270⁰:
Rosa de los vientos (puntos cardinales y grados)
Para conocer la dirección del viento podemos usar varios trucos rudimentarios:
Coger con la mano un puñado de tierra o hierba y lanzarlo hacia arriba. La dirección en la que la arena o la hierba se disperse será la dirección que lleva el viento.
Atar a un palo o caña un elemento ligero, como una cinta de tela o plástico o una manga de viento. Con este método, además de conocer la dirección del viento, podremos tener una idea de su intensidad, dependiendo del movimiento de la cinta. Además, nos permite conocer los cambios bruscos en la dirección del viento.
Cinta indicadora de la dirección del viento
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Observar los movimientos de las hojas de los árboles, la hierba o las ondas en el agua.
Observar las banderas colgadas en edificios o las veletas, teniendo en cuenta que en estas últimas la flecha apunta hacia la dirección desde la que sopla el viento, es decir, que si está apuntando hacia el oeste, significa que el viento viene del oeste.
La veleta y la bandera indican la dirección del viento
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
Para determinar la velocidad del viento es aconsejable utilizar un anemómetro que ofrece valores en diferentes unidades: millas, km/h, m/s, nudos, o beaufort (véase la conversión entre varias unidades de medición de velocidad del viento al final de este artículo).
Anemómetro
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
También se pueden consultar los informes meteorológicos del día o utilizar aplicaciones web dedicadas a deportes de vientos que facilitan tanto la dirección como la velocidad del viento:
Información del viento en una aplicación web
La escala de Beaufort es una medida empírica que relaciona la velocidad del viento con las condiciones observadas en el mar o en tierra. Esta escala se divide en valores de 0 (calma) a 12 (fuerza de huracán). A continuación se presenta esta escala solo hasta fuerza 7, porque a partir de este valor el viento puede ser peligroso y además todas las cometas se pueden destrozar en el aire. Se indican también las cometas más apropiadas para cada rango de viento:
Fuerza del
viento
Descripción
Velocidad
(Km/h)
Efectos
observables
Apropiado para
volar
0
Calma
0-1,5
Calma, el humo
asciende verticalmente
Cometas “indoor”
y pruebas de cometas por “viento relativo”*
1
Corriente suave
1,5-6
El humo indica la
dirección del viento
Cometas muy
ligeras y ligeras
2
Brisa ligera
6-11
Se caen las hojas
de los árboles, empiezan a moverse los molinos de los campos
Cometas muy
ligeras y ligeras
3
Brisa suave
11-20
Se agitan las
hojas, ondulan las banderas
Viento ideal
para la mayoría de las cometas
4
Brisa moderada
20-28
Se levanta polvo y
papeles, se agitan las copas de los árboles
Viento ideal
para la mayoría de las cometas
5
Brisa fresca
28-35
Pequeños
movimientos de los árboles, superficie de los lagos ondulada
Cometas
celulares, acrobáticas y cometas más pesadas
6
Viento fuerte
35-45
Se mueven las ramas
de los árboles, dificultad para mantener abierto el paraguas
Cometas
celulares, acrobáticas y cometas más pesadas
7
Viento muy fuerte
45-56
Se mueven los
árboles grandes, dificultad para caminar contra el viento
Cometas muy
fuertes
Escala de Beaufort (solo hasta fuerza 7)
*“Viento relativo” se refiere al que se consigue al hacer que la cometa se mueva contra el aire mediante la tracción y/o recogida del hilo, andando o corriendo (esto último poco recomendable).
La mayoría de las cometas de marca que se venden en las tiendas tienen indicado en la funda el rango de viento recomendado para su uso, pero la mayoría volará bien con velocidades del viento de entre 6 a 28 km/h. Los principales factores que afectan al rango de viento de una cometa son: el peso de la cometa, el área de la vela, la geometría de la cometa, el ángulo de ataque y la rigidez de las varillas.
Funda de una cometa
La flecha roja señala el rango de viento recomendado
Algunas modalidades del viento dificultan el vuelo de las cometas, como las turbulencias, las ráfagas y las rachas. Las primeras son aumentos de la velocidad del viento que provocan un recorrido desordenado de las partículas, apareciendo deformaciones en forma de remolinos; las ráfagas son variaciones en la dirección e intensidad del viento y las rachas son cambios repentinos y constantes de la dirección del viento junto al suelo.
Turbulencias a sotavento de una colina, especialmente si la colina es escarpada o tiene una superficie accidentada
Las turbulencias mecánicas son causadas por irregularidades en la superficie de la tierra, como las montañas, colinas, edificios, puentes o árboles. Hay una regla simple a tener en cuenta al volar una cometa para evitar las turbulencias: colocarse a una distancia de unas siete veces la altura del objeto que se interpone al viento. Así, si existe una fila de árboles de 10 m de altura que intercepta el viento, hay que volar la cometa al menos a unos 70 metros de distancia de los árboles.
Explanada con árboles al fondo
(Foto: Juan Antonio Muñoz)
En ocasiones el viento está en calma a nivel del suelo, y sin embargo a una altitud de varias decenas de metros sopla un viento capaz de sostener una cometa. Para alcanzar estas capas de viento hay que encumbrar la cometa con un ayudante que sujete la cometa cuanto más lejos mejor, y después tirar y soltar la línea dejando que la cometa vaya tomando altura poco a poco.
Conversiones:
1 m/s = 3,6 km/h = 2,24 mph = 1,95 nudos (Kn) = 1,13 Beaufort (Bft) 1 Km/h = 0,28 m/s = 0,62 mph = 0,54 nudos (kn) = 0,48 Beaufort (Bft) 1 Beaufort (Bft) = 0,84 m/s = 3,01 Km/h = 1,87 mph = 1,63 nudos (kn)